La productividad de las empresas y el entorno de crecimiento económico de Costa Rica: una discusión necesaria
Ricardo Monge y Federico Torres, de CAATEC y del ITCR, expusieron los hallazgos de una investigación realizada por ellos, con apoyo del BID y Javier Beverinotti, economista país del BID, en Costa Rica, presentó las condiciones del entorno de crecimiento económico del país y Velia Govaere cerró el evento con sus reflexiones.
A partir de estas exposiciones, se realizó una mesa redonda con especialistas de gobierno, empresa privada y academia. En su conclusión, Velia Govaere, representante de CPC y coordinadora de OCEX-UNED, presentó un análisis crítico sobre la productividad y el combate a la pobreza, con énfasis en las debilidades de la educación técnica en Costa Rica.
“OCEX Informa” se enorgullece de ofrecer a sus suscriptores los documentos, investigaciones, presentaciones gráficas y la grabación integral de esta actividad, a la que pueden tener acceso.
Cabe destacar el contexto nacional en que tuvo lugar este evento de discusión de las condiciones de la productividad de las empresas y su impacto en el crecimiento económico, así como los obstáculos a la productividad condicionados por el entorno local actual. A continuación algunos elementos relevantes del entorno económico de Costa Rica en 2015.
Una discusión pertinente
Esta discusión no podía ser de mayor pertinencia dentro del contexto nacional de bajo crecimiento económico, elevado déficit fiscal, alto desempleo, disminución de exportaciones y de inversión extranjera directa, salida de empresas del país, notoria y emblemáticamente la de INTEL. Todos esos fenómenos críticos se han venido acumulando en los últimos años, pero se han agudizado desde el inicio de la actual administración Solís. Eso no quiere decir que el agravamiento de las condiciones actuales implique la responsabilidad directa de la nueva administración sobre la difícil coyuntura, a la que se le suma una mayor dispersión y capacidad de gestión política, caracterizada por un agudo fraccionamiento legislativo, que dificulta adicionalmente el abordaje oportuno y apremiado de los problemas. Ese conjunto de situaciones ha conducido también a una desvalorización de la categoría de riesgo país, efectuada por varias calificadoras internacionales de riesgo crediticio, lo que ha, a su vez, agravado las condiciones de endeudamiento externo. Estos son algunos detalles particulares de los elementos macroeconómicos de la difícil coyuntura nacional.
La brecha fiscal aumenta en Costa Rica
A diferencia de otros países centroamericanos, año con año, la brecha fiscal de Costa Rica, se va empeorando. No sólo es el país con mayor déficit fiscal del Istmo en 2015, sino que, a diferencia de Guatemala, Honduras y Nicaragua, donde la brecha fiscal se acorta, las perspectivas, en Costa Rica, son que suba, del 5,6% de déficit, con que cerró en 2014, al 6,9% en 2015. Este porcentaje sitúa al país en el puesto 143, de 183 países del ranking de déficit respecto al PIB (datosmacro.com). Comparativamente, Nicaragua cerró el 2014 con un déficit apenas del 0,3%, según el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales. Honduras, el país más pobre de la región, logró acortar la brecha fiscal de casi 8% que tenía en 2013, a solamente el 4,4% en 2014, con una perspectiva de mejoramiento para el 2015. La gravedad del alto déficit fiscal de Costa Rica se acrecienta por la incapacidad de gestión política para enfrentarlo, lo que ha redundado en su crecimiento y no en su mejora.
En Costa Rica, el endeudamiento público equivale ya al 43,5% del PIB, con un peligroso crecimiento, de 4%, por año, en los últimos años, con relación al producto nacional. El servicio de la deuda pública ocupa un 22% de los ingresos del Estado. Tómese en cuenta que el 70% del nuevo endeudamiento de 2015 es para amortizar deuda y pagar sus intereses.
Deterioro de la calificación de riesgo de Costa Rica
En Enero de 2015, la calificadora Fitch Rating, revisó la perspectiva de Costa Rica en su calificación de largo plazo de “estable a negativa”. Esta decisión de Fitch estuvo influenciada por el alto déficit fiscal estructural del país y las dificultades para implementar las reformas fiscales, en la última década (Secretaría Ejecutiva del Consejo Monetario Centroamericano Informe de Riesgo País. Ier Trimestre, 2015). Esta calificación viene a sumarse a la que hiciera Moody, en 2014, creando condiciones financieras internacionales más difíciles para el inevitable crecimiento del endeudamiento.
Aumenta el desempleo en 2015
Durante el primer trimestre de este año, el desempleo alcanzó al 10,1% de las personas, un incremento de 0,3 puntos porcentuales comparado con el mismo periodo del 2014, cuando llegó al 9,8%, según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC) (La Nación, 19-5-2015) A la dificultad de conseguir trabajo se adiciona el subempleo, es decir, aquellas personas que trabajan menos horas de las que necesitan. El porcentaje de subempleo se estimó en 12,9% en este trimestre, lo que registró un 1% superior al primer trimestre del año anterior. Ambas condiciones apuntan a un desmejoramiento de las condiciones económicas.
Disminución de exportaciones y de inversión extranjera directa
Una inesperada caída en el valor de las exportaciones del agro vino a sumarse a la ya prevista disminución de las exportaciones del sector eléctrico y electrónico, debido a la salida de Intel. El resultado general de las exportaciones en los primeros cinco meses del 2015 muestra una caída de un 17%, en comparación con igual periodo del 2014. La caída del sector eléctrico y electrónico, por la influencia de la salida de Intel, fue del 74%. El golpe fue formidable, de $1.252 millones que había exportado de enero a mayo del 2014, a exportar solo $326 millones en los primeros cinco meses del 2015. Estas cifras de 2015 vienen a sumarse a una tendencia ya manifestada en 2014, cuando el valor de las exportaciones había ya disminuido un 4%, con relación al 2013, en un amplio espectro de los productos de exportación: el sector alimentario exportó, entonces (2014 con relación al 2013), 3,6% menos, el químico y farmacéutico 2,4% menos, textiles 9,2% menos, papel y cartón 7% menos, y caucho 1,8% menos. El sector eléctrico y electrónico mostró, ya en 2014, una caída de un 17%.
Las inversiones extranjeras directas (IED) también disminuyeron, un 11%, según el manual 6 del banco central. Alexander Mora, Ministro de Comercio Exterior, explicó que hay cuatro factores que influyen en esta caída de la IED: una mayor repatriación de dividendos, mayor registro de pérdidas, menor reinversión de utilidades y Olivier Castro, Presidente del Banco Central, anunció una revisión hacia la baja de las expectativas de crecimiento económico.
La productividad de las empresas
“OCEX-Informa” invita a sus suscriptores a leer los detalles del estudio de Monge-Torres, presentado y transmitido en vivo por Internet en conferencia participativa, en la UNED. El estudio, las presentaciones y la discusión que le siguió, se deben contextualizar dentro de ese difícil panorama del contexto nacional que hemos anteriormente resumido.
Monge-Torres parten de una muestra representativa de más de 16300 empresas en el período 2001-2012, abarcando agricultura, manufactura, comercio y servicios. Consideran en su estudio las variables de empresas por número de empleados, salarios, ubicación geográfica, sector productivo, exportación y encadenamientos (Descargar aquí el estudio Monge-Torrés). Sus conclusiones muestran los condicionantes que existen en Costa Rica para el mejoramiento de la productividad de las empresas, de acuerdo a las variables estudiadas, y aporta, adicionalmente, datos de la difícil situación de la productividad de las empresas. Según ese estudio, Costa Rica ha venido perdiendo de forma sistemática productividad total de los factores de producción, con una productividad de las empresas menor a la media latinoamericana. Es por eso que el análisis que presenta de las condiciones de mejora de la productividad de las empresas es de absoluta actualidad. En su presentación Ricardo Monge y Federico Torres muestran los condicionantes de la productividad de las empresas y la relación de productividad de acuerdo al sector económico estudiado, a las regiones y al tamaño de las empresas. (Descargar aquí la presentación brindada)
En su informe de las condiciones nacionales Javier Beverinotti, economista país del BID en Costa Rica, presentó un “Diagnóstico de Crecimiento de Costa Rica”. En el resumen de este diagnóstico, Beverinotti explica que su estudio “…identifica las restricciones más acuciantes al crecimiento económico. El análisis muestra a la infraestructura como una de las principales restricciones, pues el deterioro y poca inversión en obras, en la última década, restan competitividad a Costa Rica, un país caracterizado por su estrategia de apertura comercial y con una posición geográfica estratégica para el comercio exterior. Por lo tanto, la escasez de mano de obra calificada en áreas estratégicas y los pocos encadenamientos productivos de las Pequeñas y Medianas Empresas (PyMEs) con grandes transnacionales instaladas en zonas francas (ZF), son restricciones a la atracción de mayores inversiones de alta tecnología y al crecimiento de empresas fuera de regímenes especiales. Por último, el déficit fiscal significa un reto importante para el Gobierno de Costa Rica, pues de continuar en la posición actual se podrían llegar a tener desequilibrios macroeconómicos que desincentiven la inversión privada. (Descargar aquí este Diagnóstico).
En su presentación de este estudio, Beverinotti presenta un panorama alarmante del deterioro de los factores de riesgo comparando el Diagnóstico que realizara el BID en el 2009 y éste del 2015. Mientras en 2009, las condiciones de Infraestructura, ambiente de negocios y contexto institucional estaban en situación grave, en 2015, estas condiciones no sólo no han mejorado, sino que se han agravado, adicionalmente, las condiciones de capital humano y de riesgos macroeconómicos.
En el campo de las políticas públicas se dificultan los consensos para implementar reformas, se desarrolla un peligroso alto poder de veto por parte de las minorías y aumentan las débiles facultades legislativas por parte del Poder Ejecutivo, para contrarrestar el fraccionamiento del legislativo.
En cuanto al crecimiento económico Beverinotti explica que aunque en los últimos 10 años Costa Rica ha tenido un crecimiento anual casi 25% superior al promedio regional, ese crecimiento, en América Latina se ha debido a incrementos de productividad y mejora de los términos de intercambio, mientras que en Costa Rica se explica, más bien, por incrementos de capital, lo que hace que, en la actualidad, Costa Rica presente un deterioro de un 23% en sus términos de intercambio, contra un 22% del promedio de mejoría de términos de intercambio de América Latina, desde comienzos de siglo. Esa situación es completamente diferente a los años 90 del siglo pasado, cuando Costa Rica presentaba mejores condiciones que el resto de América Latina.
Particularmente grave, encuentra Beverinotti, la desconexión de profesionales graduados frente a la demanda del mercado. En contradicción con la especialidad del contenido exportador de Costa Rica (40%) con relación tanto a América Latina (12%), como a los países de la OCDE (18.5%), el 68% de las graduaciones de las universidades estatales son en artes, literatura, educación y ciencias sociales, contra un 8% de ingeniería. La situación de las graduaciones de las universidades no presenta mejor pertinencia con el mercado (Ciencias Sociales, 45,5%; Educación, 26,2%; Ingeniería, 5,2%). Como resultado de semejante brecha entre la oferta educativa y la demanda de las empresas. Explicó Beverinotti, en su presentación, que CINDE señaló, en 2012 un faltante de 3700 universitarios y técnicos y advirtió entonces un diagnóstico de 45.000 faltantes para 2016. Esas observaciones de Beverinotti se ratifican con lo recientemente expuesto por una reciente encuesta de ManpowerGroup, que indica que el 46% de los patronos del país reportó en 2015 problemas para solventar la escasez de talento. (Descargar aquí la presentación de Beverinotti)
A partir de las conferencias de Ricardo Monge, Federico Torres y Javier Beverinotti, varios especialistas de gobierno, empresa privada y academia con responsabilidades en políticas públicas, planteron sus criterios y discutieron los contenidos de las exposiciones, en el conversatorio donde participaron Juan Carlos Leiva – Profesor del ITCR; Pedro Beirute– Gerente de Procomer; Javier Beverinotti; Federico Chavarría – Socio Deloitte y Vicepresidente CPC y Federico Torres.
Al final de la actividad, Velia Govaere Vicarioli, Representante de CPC y Coordinadora de OCEX-UNED, presentó un análisis crítico de las conclusiones que se derivan del conversatorio sobre las condiciones de productividad y el crecimiento de las empresas, con particular énfasis en las debilidades de la educación técnica en Costa Rica. (Descargar aquí sus conclusiones)
Escrito por: MBA. Hellen Ruiz Hidalgo
Comunicadora estratégica del OCEX-UNED